Carecemos del lenguaje oportuno para narrar el presente. La literatura parece agonizar entre narrativas digitales con puntos de vista cada vez más estrechos en los que solo cabe la primera persona y el relato que se adhiere completamente a “la verdad”. La ficción parece agonizar...
Acudir a un cementerio como caminante implica moverse viva en un espacio de muerte. Hacer una crónica de eso es doblemente una contradicción: la crónica, que intenta constatar el tiempo, se ve situada en el más grande vacío temporal, con la eternidad durmiendo bajo los pies de quien la escribe...
Al leer Siempre hemos vivido en el castillo, asistimos hipnotizados a una historia tanto de miedo como de amor, que se equilibra al tratarse no del asesinato de una familia a mano de una de sus hijas, sino de la muerte del orden patriarcal en un hogar y la creación de un mundo extraño y femenino que, parafraseando a Jackson, se deleita en el temor...
En Carrie, de Stephen King, la llegada de la menstruación representa un giro en la vida de la protagonista; y no, no es el típico giro que nos sucede a todas: cambios hormonales, cólicos, acné, ira desmedida, ascenso a la locura. No, es algo mucho más reconfortante con lo que la naturaleza debería premiarnos a todas por soportar la sangre cada mes: telequinesis...
¿Qué decir de un libro rizoma que no tiene principio ni fin, que carece de cualquier eje o jerarquía? No hay por donde empezar al escribir sobre Los detectives salvajes porque leerlo no es seguir el hilo que nos tiende Bolaño, sino una caída, una zambullida en una trampa, en un abrazo...
La última niebla fue publicada por primera vez en 1934 en Buenos Aires, y alcanzó una rápida popularidad por su ruptura con la literatura criollista del momento y la inauguración, en Latinoamérica, de una literatura con matices surrealistas. Bombal combinó por primera vez un realismo que retrataba la vida de las mujeres de entonces con elementos fantásticos, creando un universo literario complejo que navega en la tensión entre lo real y lo irreal....
Mi viejo libro de Juan Rulfo se deshace mientras lo leo. Sus páginas han adquirido la vaga consistencia de los habitantes de Comala, recuerdos petrificados en el aire de un pueblo abandonado. No es la primera vez que vengo a Comala. No, he venido muchas veces. Seguramente usted y todos hemos venido alguna vez, así no se tenga ni idea de dónde queda o qué es...
Las canciones de Lana están plagadas de una incontrolable pulsión de muerte. Ha sabido tomar el cliché de adolescente deprimida, desbaratarlo, y transformarlo en un modo de habitar el mundo a través de su música. El deseo, la violencia, la fragilidad y el amor que desgarra rodean sus letras que sangran, porque son reales y están vivas...
¿Qué será la poesía?
Un pájaro que se pierde en el follaje.
Un pez invisible que deja su estela en el agua.
El amor por un desconocido.
No sé qué es la poesía,
una vez sucede
solo deja marcas sangrantes en mi cuerpo.
No recuerdo cómo pasó, solo el leve souvenir de qué lo hizo: el filo.
Sobre la sordidez de la poesía. Acerca de la inutilidad del poema. No saber qué más hacer con las palabras aparte de escribirlas o leerlas. Entender lo poco que se entienden, lo mucho que se tiene que descender para trascender el reflejo de alguna. Combatir la imagen prediseñada, el tono obligatorio y recrear la palabra.